LOS ABUELOS CARACOLES S.L.
Muy saludables
Los humanos y nuestros ancestros hemos comido caracoles desde tiempos prehistóricos. Su abundancia, su cría relativamente fácil y sus propiedades nutritivas hacían de este molusco un aporte de proteína animal asequible y económica.
El caracoles es un animal herbívoro, como la vaca, que transforma las hierbas y pastos que ingiere en carne.
Entre sus propiedades más distinguidas se encuentran (según bibliografía):
Baja cantidad de grasa en carne (0,5-0,8%)
Lo cual lo convierte en un atractivo alimento para personas que necesiten controlar su aporte de grasas tanto por salud como por control de peso.
Bajo aporte calórico
El aporte calórico que aportan los caracoles es muy bajo: apenas 90 kilocalorías por cada 100 gramos.
Proteínas de gran valor
Similares a los de la carne roja, y contiene los aminoácidos esenciales para la salud humana.
Alto contenido en minerales
Especialmente hierro, magnesio, potasio, selenio, fósforo, sodio y calcio. Alto contenido en agua, por lo que es un alimento que favorece la hidratación.
Cero contenido en azúcares
En LOS ABUELOS CARACOLES S.L. somos conscientes de que manejamos una materia prima excepcional, por lo que es una preocupación constante que el caracol llegue a su mesa conservando todas sus propiedades nutritivas y frescor natural.



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LOS ABUELOS CARACOLES S.L.
Historia y
uso culinario
Los caracoles, se encuentran presentes en nuestra dieta desde épocas prehistóricas. Tal y como señala el crítico gastronómico Apicus Apicio en su blog Historias de la gastronomía. Se cree que los caracoles debieron ser una de las primeras fuentes de proteínas animales de nuestros antepasados. En culturas antiguas, como la romana, la helicicultura o cría de caracoles fue una práctica peculiar. Estas primeras protogranjas se llamaban cochlearium y en ellas se criaban caracoles alimentándolos con leche, salvado y algo de vino. Plinio el Viejo dejó escrito que Fulvius Hirpinus instaló una granja para la cría de caracoles en Tarquinia, sobre el año 50 a. C.